La appassionata, obra leída como homenaje a Héctor Azar
- Gilberto Pérez Gallardo, Carlos Azar y El Centro de Arte Dramático (CADAC) le rindieron homenaje al dramaturgo poblano
- La interpretación de los actores les valió un largo aplauso en la Galería de Rectores del Palacio de Minería
México, DF a 23 de febrero de 2010.- El tema central de La appassionata, primera obra de teatro del dramaturgo Héctor Azar, es la muerte. Así lo confirmó la llegada de la catrina a la Galería de Rectores del Palacio de Minería en el marco de la edición XXXI de la Feria Internacional del Libro.
El maestro fundó el Centro de Arte Dramático (CADAC) en 1975; y a 35 años de su creación, los jóvenes pupilos del centro ofrecieron al auditorio la ópera prima de su promotor. Gilberto Pérez Gallardo y Carlos Azar, hijo del homenajeado, condimentaron con experiencia la representación leída.
En contraposición a las actuaciones rigurosas en donde todo el cuerpo es una herramienta para transmitir emociones, los histriones sólo utilizaron sus voces para matizar, sus brazos para señalar, sus miradas para exaltar, sus rostros para gesticular y sus cabezas para asentir o negar.
La historia trata sobre una familia mexicana nuclear compuesta por cuatro hijos y uno muerto. Gaudencia o Gardenia, la madre, no puede soportar la pérdida de su vástago, el más querido, y esto afecta al resto de los integrantes. El padre, Francisco o Sagitario, gusta de pegar a su mujer e inconformarse ante la vida de perros y gatos que lleva; hasta que el final sorprende al espectador con una visita casual de la catrina al seno familiar.
La interpretación de los actores les valió un largo aplauso concedido por el público. Con recursos nimios, una grabadora y todos uniformados de blanco de la cintura para arriba, lograron un homenaje digno para el dramaturgo poblano Héctor Azar.